¿Alguna vez te has perdido o desorientado en alta mar? ¿Conoces el sextante náutico? Es una herramienta que a muchos nos ha sacado de un aprieto en más de una ocasión y, si bien es un utensilio con mucha historia, su función sigue siendo tan vigente como siempre.
Aprender a utilizarlo es, sin duda, uno de los conocimientos más prácticos de la navegación que podemos obtener en este ámbito.
¿Qué es el sextante náutico?
El sextante naútico es un instrumento que se emplea para medir la separación angular entre dos puntos, como un astro y el horizonte -es el uso más habitual de esta herramienta- o dos partes distintas de una costa. Es una herramienta muy utilizado en náutica, donde además tiene su origen, pero que tiene otras aplicaciones fuera del mar.
Su existencia se debe a la combinación de otros instrumentos más antiguos utilizados con la misma finalidad, pero cuyos resultados ofrecían una menor precisión, como son el cuadrante y el astrolabio. Se estima que se inventó en el siglo XVIII, pero ha ido evolucionando con el paso del tiempo para adaptarse a las diversas necesidades de uso de cada entorno. Hoy en día el sextante naútico es uno de los elementos obligatorio en las embarcaciones.
¿Para qué sirve el sextante náutico en navegación?
El sextante náutico se ha utilizado siempre en el ámbito de la navegación -porque es donde comenzó a usarse inicialmente-, y en el astronómico, y su utilidad reside en el estudio del movimiento de las estrellas y los planetas y la elaboración de mapas celestes, ya que mide con precisión la posición de los astros.
No obstante, su uso más práctico es el de averiguar dónde nos encontramos en el mar, ya que haciendo ciertos cálculos podemos obtener cuál es nuestra latitud exacta, es decir, la distancia que nos separa del ecuador.
Aplicaciones del sextante náutico fuera de la navegación
Como decimos, el sextante mide la distancia angular entre dos puntos, por lo que finalmente también ha acabado resultando útil en otros campos lejos del mar y las estrellas. En geodesia y topografía este instrumento tiene una gran aplicación práctica dada su precisión a la hora de medir distintas alturas y distancias.
Partes del sextante náutico
Como podemos intuir, el sextante náutico es un instrumento complejo, compuesto de distintos elementos que ofrecen un resultado combinando sus características. Para entender el funcionamiento del sextante es conveniente conocer cada una de estas piezas y entender su propósito en este entramado. Así pues, veamos en qué consisten los principales elementos de un sextante -puede haber algunos más dependiendo de la fabricación-:
- El espejo -en la actualidad es habitual ver sextantes con varios espejos con diferentes funciones- se utiliza para ver el objeto sin necesidad de mirarlo.
- El ocular o visor es la mira por donde se observa a la hora de utilizar el sextante náutico.
- El limbo o arco graduado es una escala numerada a través de la cual obtenemos las medidas.
- El vernier es una escala adicional empleada en la medición de fracciones de grado.
- El índice es una pieza deslizante que sostiene el espejo y nos permite situarlo exactamente donde necesitamos.
- El marco es la pieza base que soporta y une el resto de piezas del sextante náutico.
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Cómo utilizar el sextante náutico
El uso más común del sextante náutico si estamos navegando es el de medir nuestra latitud exacta cuando nos encontramos en medio del océano. Para lograr ubicar la posición necesitamos dar cuatro pequeños pasos en el uso de esta herramienta, que son los siguientes.
Primer paso, observar
Antes de utilizar el sextante debemos escoger un cuerpo celeste. Habitualmente se eligen el sol y la luna porque son los más sencillos de encontrar, pero lo cierto es que también serviría cualquier estrella o planeta. Una vez seleccionado el cuerpo celeste, apuntamos hacia él con el visor y lo observamos.
Segundo paso, alinear el sextante
Para alinear el sextante necesitamos que el cuerpo celeste que estamos observando se sitúe a la altura del horizonte. Debemos llevar la parte baja de la estrella hasta situarla en la línea del horizonte, algo que haremos deslizando el espejo de la herramienta hasta que veamos que se encuentra en esta posición.
Tercer paso, tomar la medida
El tercer paso es tomar la medida del ángulo entre el cuerpo celeste y el horizonte, para lo cual utilizaremos el arco graduado. En este paso es necesario deslizar el propio limbo hasta que la estrella se vea reflejada en el espejo y aparezca en la escala graduada.
Cuarto paso, hacer el cálculo
Por lo general, para calcular el ángulo exacto podemos recurrir a fórmulas náuticas que tengamos a mano en el barco, no hay necesidad de memorizarlas o interpretar los datos de forma directa. Existen tablas que nos ayudan a entender la latitud en la que nos encontramos a partir de los resultados de medición que ofrezca el sextante náutico.
La fórmula del semimeridiano para calcular el sextante náutico
No obstante, una de las fórmulas más utilizadas a la hora de obtener la latitud a partir de un sextante es la del semimeridiano. Para calcularla necesitamos obtener previamente a partir de tablas náuticas la declinación del objeto celeste -el ángulo en el que se encuentra con respecto al ecuador celeste-, y la altura angular del objeto -obtenida con el sextante- ya que la fórmula es la siguiente:
90º – Altura angular del objeto + Declinación del objeto
¿Por qué aprender a utilizar el sextante náutico?
Como hemos visto a lo largo del artículo, el sextante náutico es un instrumento verdaderamente útil en el ámbito de la navegación, ya que nos puede ayudar a orientarnos en un momento dado si nos perdemos en el océano. Al fin y al cabo, se trata de una herramienta más que nos aporta mayor seguridad e independencia cuando estamos en alta mar.
